Podemos intuir que las Health Savings Accounts o cuentas de ahorro para gastos médicos te ayudan a guardar dinero relacionado con estas incidencias.
El asunto es que no todo el mundo tiene acceso a estos instrumentos financieros en Estados Unidos, porque la ley te exige estar afiliado a un HDHP (plan de salud de deducible alto).
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Esto quiere decir que el plan sanitario al que pertenezcas debe estar calificado para otorgar una HSA. De acuerdo al IRS, esta clase de cobertura debe tener un deducible mayor que los otorgados por los beneficios estipulados en los seguros de salud individuales comunes.
Además, debe incluir copagos, coseguros y un límite máximo de lo que puedes aportar.
¿Necesitas una Health Savings Account?
Las cuentas de ahorro para gastos médicos tienen sus pros y contras que debes sopesar al hacerte esta pregunta. Esta clase de decisiones ameritan que consideres tus opciones, cuánto presupuesto tienes, y el plan de salud que podrías necesitar en los siguientes años en función de tu estado de salud actual.
Cuenta de ahorros para gastos médicos (HSA) de KeyBank que te permite acumular dinero para cuando necesites acudir a algún servicio médico.
Cuenta de ahorro con cheques y tarjetas que sirve para guardar dinero para gastos médicos, con aportaciones deducibles de impuestos.
Cuenta remunerada para ahorrar y disponer de liquidez cuando tengas que afrontar algún gasto médico para ti o tu familia, ahorrando impuestos en las aportaciones.
Cuenta bancaria para que ahorres para tus gastos médicos y los de tu familia, remunerada y con beneficios fiscales por las aportaciones que hagas en ella.
Cuenta de ahorro para gastos médicos que te permite utilizar el dinero con una tarjeta de débito o con la emisión de cheques para realizar pagos sanitarios.
Cuenta de ahorro para gastos médicos calificados que te ofrece ventajas fiscales por el dinero que deposites.
La cuenta Health Savings te permite ahorrar con ventajas fiscales para aquellos gastos médicos que tengas que complementar si tu seguro de saludo no los cubre
Puedes plantearte tres escenarios posibles:
- Te sientes saludable. Puede tratarse de una opción atractiva para atender los gastos médicos que podrían presentarse en los años venideros.
- Está pensando en la jubilación. En este caso, la HSA puede servirte para usar el dinero en atención médica después de que entres a la etapa de retiro.
- Tienes problemas de salud. En el supuesto de que vayas a necesitar un tratamiento costoso en el futuro y crees que no calificas para un deducible alto, un plan de salud con HSA no es la mejor alternativa.
¿Cómo funcionan las cuentas de ahorros para gastos médicos (HSA)?
Una vez que estés afiliado a un plan sanitario con deducible alto y hayas establecido tu HSA, puedes hacer las contribuciones por tu cuenta. La dinámica de este recurso se ve mejor conociendo sus ventajas:
El dinero que abonas es deducible de impuestos, lo cual reduce tus ingresos gravables. - Si tienes 65 años y usas los fondos para gastos médicos calificados, puedes retirarlos libres de impuestos.
- No existe una política de “usar o perder”. Ya que eres dueño de la cuenta, el dinero se mantiene como tuyo año tras año, sin importar que dejes tu empleo o te retires.
- Eres el titular de la cuenta, no tu empleador. Puedes hacer las contribuciones que quieras dentro del límite anual ($3600 para individuos y $7200 para familias), como si se tratara de una cuenta normal. Esto también aplica para cualquier otra persona que quiera agregar algo a tu fondo.
- Esta cuenta suele incluir una tarjeta de débito para que pagues por tus gastos cuando haga falta. Además, puedes retribuirte de la HSA si pagas con algún método alternativo.
- Si pasas de los 65, no hay ninguna condición sobre cómo debes usar el dinero. Puedes seguir retirándolo libre de impuestos para cubrir gastos médicos. También puedes sacarlo de manera tradicional para cualquier inversión o compra, solo que pagando impuestos.
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Gastos que abarca una HSA
Hay varias cosas que puedes atender con este tipo de cuenta:
- Fisioterapia
- Consultas médicas
- Atención preventiva
- Cuidado dental y ocular
- Tratamiento por adicciones
- Pruebas de laboratorio
- Servicios hospitalarios
- Fármacos recetados
- Equipos médicos
Desventajas de una cuenta de ahorros para gastos médicos
Cuando sabes que tienes los requisitos para conseguir una HSA, considera sus desventajas:
- Si sacas el capital acumulado antes de los 65 y no lo usas para su propósito especificado, aplican impuestos y te multan con una comisión del 20% del retiro.
- Algunas personas se muestran reacias a buscar atención sanitaria cuando les hace falta por no querer gastar el dinero que tienen en esta cuenta.
- Debes mantener un registro detallado de las facturas o recibos que prueban el uso del dinero en gastos médicos aprobados. Esto es para sustentar tus acciones ante una auditoría del IRS.
- Algunas cuentas de ahorro para gastos médicos incluyen una tarifa de mantenimiento mensual o una comisión por transacción según la entidad financiera. Aunque no son cargos particularmente altos, su acumulación te resta de los intereses que genera. En algunos casos, puedes evitar estas comisiones manteniendo un saldo determinado.
- El plan de salud con deducible alto (HDHP) que te exige este instrumento de ahorro puede ser una carga financiera mucho mayor que otras coberturas sanitarias. Aunque las primas mensuales son más bajas, para algunos resulta complicado gastar $1,400 (individual) o $2,800 (familiar) para activar el deducible de una operación costosa. Por eso la recomendación de evaluar si tendrás muchos o pocos gastos médicos en el futuro.
Las cuentas de ahorro para gastos médicos (HSA) pueden ser vistas como un fondo complementario o de emergencia. Si quieres saber más sobre los recursos financieros más utilizados, no dejes de consultarnos en Busconómico.
English: What are the Health Savings Accounts (HSA)?