En la medida que los comercios más importantes del mundo van adoptando las tecnologías más recientes, la gente también va incorporándose a esta tendencia.
La mayoría, de una forma u otra, estamos cada vez más familiarizados con las carteras digitales o digital wallets y lo que pueden hacer. Por eso queremos profundizar sobre el uso de tarjetas y otras de sus cualidades.
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Las apps que marcan tendencia
Los monederos digitales son una tecnología que sigue ganando adeptos por la facilidad que representan para el manejo de las finanzas personales.
Apps como PayPal, Skrill, Uphold y más recientemente: Apple Pay, Google Pay, Samsung Pay, V.me (Visa) o Dwolla, entre otras sirven para organizar tus pagos de forma más eficiente y sin tener que preocuparse por cargar efectivo o tarjetas físicas.
La creciente popularidad en su uso está estrechamente vinculada a la compra de smartphones y otros dispositivos similares. Muchas de estas aplicaciones ya vienen incorporadas y las empresas detrás de las mismas mantienen convenios exclusivos con los comercios más importantes del planeta.
Además, muchas tiendas físicas siguen habilitando la tecnología para procesar estos pagos electrónicos.
Aunque en Estados Unidos prevalece una mentalidad conservadora con respecto a las carteras digitales, eso no cambia el hecho de que las megacorporaciones no dejarán de apostar por su popularización.
Los millennials y las generaciones que les siguen favorecen el uso de la tecnología y más cuando se trata de agilizar un proceso con unos simples clicks.
Por otra parte, la llegada de las e-wallets ha significado un avance en cuanto al procesamiento de pago y la gestión financiera. Gracias a la encriptación avanzada, tanto vendedores como compradores están más protegidos contra el fraude.
Con una cartera digital, también puedes almacenar tarjetas regalo, tickets de transporte, entradas para conciertos e incluso recibir recompensas, cupones o cosas gratis de quienes patrocinan estas apps para manejar tu dinero.
Cómo incorporar una tarjeta a tu e-wallet
Al momento de usar una cartera digital con un dispositivo, vas a necesitar tener habilitada la tecnología NFC, esta resulta estándar para los modelos más recientes.
Este proceso también exige que la configuración de tu smartphone bloquee la pantalla con un método biométrico o a través de un código, lo cual va autorizar el pago respectivo.
Una de las grandes facilidades de las carteras digitales es que están diseñadas para que cualquiera las pueda utilizar sin muchas complicaciones. Estas apps cuentan con wizards o asistentes para incorporar tus tarjetas de crédito, débito, departamentales o de regalo según las necesidades que tengas.
Basta con escanear o escribir el número del plástico, esperar la confirmación de la empresa emisora y listo. Si quieres eliminar alguna tarjeta, también es muy sencillo.
De igual forma, puedes agregar tarjetas de recompensas de tus tiendas favoritas o incluso las aplicaciones de las mismas para que funcionen de manera sincronizada.
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Así puedes escanear el código de barras o ingresarlo de forma manual. También es posible agregar boletos de vuelos, membresías y otros tiquetes escaneando el código QR, mediante un mensaje o un correo.
Cuando debas pagar con una e-wallet en un comercio que tenga habilitada esta tecnología, descubrirás que el proceso es muy simple. Solamente debes ir a la registradora, abrir la aplicación correspondiente, sostener el smartphone cerca del punto NFC y autorizar el pago con el código o el reconocimiento biométrico. Una vez terminado, la pantalla te confirmará la operación.
Preocupaciones básicas sobre las carteras digitales
A pesar de que en Estados Unidos la tecnología avanza más rápido que en otros países, las personas tienen sus reservas para usar las digital wallets.
Las preocupaciones principales en este sentido están dirigidas a la privacidad de los datos y los sistemas de seguridad que cuidan las operaciones. Como los cibercriminales siempre están un paso adelante, son temores legítimos.
Si comparamos la complejidad de una e-wallet con métodos más directos, como el efectivo o la tarjeta de crédito, existen razones para ser precavidos. De hecho, la información pasa por el celular, el sistema operativo, la app y la fuente de pago, siendo mayor las probabilidades de que alguno falle.
No obstante, muchos expertos afirman que este método es más seguro que los más tradicionales.
Las carteras digitales están diseñadas para tener protecciones redundantes, lo que se traduce en certificados digitales para compras online y offline.
Estas medidas de seguridad son archivos adjuntos para la correspondencia electrónica que sirven para verificar tu identidad y la del receptor, de tal forma que ambas pueden codificar cualquier transacción.
Además, los dispositivos con tecnología NFC cuentan con microprocesadores especiales que están encriptados para operaciones financieras. La intención es almacenar los datos para realizar las transacciones, por lo que, aun teniendo el PIN o el teléfono, el hacker no puede obtener la información del chip.
Como ves, las carteras digitales son un recurso que vale la pena explorar si buscas simplificar tus finanzas personales. Al igual que Busconómico, es una herramienta muy útil para tu economía personal.
English: Using your credit cards with digital or virtual wallets